Sandía en escabeche para el invierno: el refrigerio salado perfecto
En los viejos tiempos, las sandías en escabeche eran comunes. Al fin y al cabo, sólo en el sur las sandías tenían tiempo de madurar y eran bastante dulces. En la mayor parte de nuestra Patria, las sandías eran pequeñas y ácidas, y su sabor no causaba mucho deleite ni en los adultos ni en los niños. Se cultivaron, pero se cultivaron específicamente para la fermentación.
Hoy en día hay muchas sandías dulces, pero muchos recuerdan ese mismo sabor de la infancia, y para los que quieran volver a aquellos años, les recordaré la receta de sandías en escabeche.
Dependiendo del tamaño de la sandía, se fermenta en barrica, en balde o en tinajas. Es más conveniente cortar las sandías grandes en trozos, pero el sabor más natural, por supuesto, es el de las sandías pequeñas que se fermentan enteras en un barril de madera.
Si compraste una sandía grande y no está lo suficientemente dulce, no te entristezcas y fermentala según la antigua receta.
Las sandías grandes deben lavarse. Si su piel es demasiado gruesa, se puede cortar una parte y hacer sandia confitada, o cocinar tarro de mermelada.
Corta la sandía en pequeños triángulos para que quepan en el cuello de la botella. No apisone demasiado fuerte, de lo contrario la sandía soltará jugo, pero la pulpa misma quedará como una esponja.
Prepara la salmuera:
- 3 litros de agua;
- 200 gramos. sal;
- un par de dientes de ajo;
- varias ramitas de eneldo;
- Si lo desea, puede agregar una vaina de pimiento picante.
Coloca el ajo y las hierbas en un frasco con la sandía.
Hervir la salmuera, disolver la sal y dejar enfriar.La sandía se debe verter exclusivamente con salmuera fría para que no se cocine demasiado.
Tapa el tarro de sandía con un trozo de tela y déjalo 5 días a temperatura ambiente. Durante este tiempo, la sandía tendrá tiempo de fermentar y salar adecuadamente.
Para detener el proceso de fermentación, el recipiente con la sandía se debe trasladar a un lugar fresco o colocar en el frigorífico.
Cuando se salan en un barril de madera, las sandías pequeñas se fermentan enteras. Pero antes de meterlas en un barril conviene hacer varios pinchazos en cada sandía.
Para esto es adecuada una aguja de tejer o un punzón. Para llenar los espacios entre la sandía, las manzanas se fermentan al mismo tiempo y las capas se cubren con paja de centeno al vapor.
Por supuesto, estas sandías fermentan un poco más y tendrás que esperar al menos 20 días antes de sacarlas del barril y tomar una muestra. Pero el sabor de las sandías fermentadas en barrica merece la pena.
Pruébalo tú mismo y mira el vídeo sobre cómo preparar sandías encurtidas en casa: