Cómo congelar flechas de ajo para el invierno y cómo cocinar deliciosamente flechas de ajo
Si haces algo con tus propias manos, empiezas a apreciar más el resultado. No quiero perder tiempo y energía. Esto es exactamente lo que me pasó con las flechas de ajo. Después de que comenzamos a cultivar ajo en nuestro propio jardín, estudié en detalle lo que se debía hacer para que las cabezas crecieran grandes y fuertes.
Resultó que era necesario romper todas las flechas tan pronto como empezaron a aparecer. Como resultado de este procedimiento, aparece una gran pelvis de brotes jóvenes y suculentos. Resulta que lo levantamos, lo levantamos y luego lo tiramos... No podía permitir que esto sucediera. Entonces tuve preguntas: "¿Qué se puede preparar con flechas de ajo y cómo prepararlas para el invierno?" Busqué una respuesta en Internet, pregunté a mis amigos y me di cuenta de que la mejor manera de prepararlo es simplemente congelarlos. Esta receta paso a paso con fotos se lo enseñará y le contará a todo el que quiera saber cómo la hago.
Cómo congelar flechas de ajo para el invierno.
Cortamos la parte superior de los brotes tiernos: la parte donde empieza a formarse el color, y la tiramos.
Lave los brotes finos y elásticos restantes y córtelos en trozos de tres a cinco centímetros de largo.
Colóquelos en agua hirviendo con sal añadida.
Hervir durante diez minutos y escurrir el agua hirviendo. Dejar en un recipiente conveniente hasta que esté completamente frío. Vertemos los brotes hervidos en cajas de plástico.
Si no hay suficientes cajas, puedes utilizar bolsas desechables. Cerramos bien las cajas con tapas y atamos las bolsas. Para estar seguro, cuando congelo, siempre tomo dos y los pongo uno dentro del otro. Coloque el recipiente lleno de deliciosos y saludables brotes de ajo en el congelador para guardarlo.
En invierno, esta preparación se puede utilizar de forma muy fácil y rápida, preparando un refrigerio caliente con ella. Simplemente fríe un aro de cebolla en mantequilla hasta que esté dorado y agréguele flechas congeladas. Freír todo junto un poco, agregar crema agria, pimienta, sal, si es necesario. El plato está listo.
Ahora, sabiendo cómo conservar las flechas de ajo para el invierno y cómo usarlas, qué cocinar con ellas, espero que siempre tengas a mano una o dos bolsas de flechas de ajo congeladas. ¡Buen provecho!