Cómo congelar bálsamo de limón
Melissa, o bálsamo de limón, se considera no solo una hierba medicinal, sino que también tiene un sabor y aroma increíbles, indispensable en la preparación de ciertos platos. Por lo general, el bálsamo de limón se seca durante el invierno, pero cuando se seca, la mayor parte del aroma se evapora y se pierde el color. La congelación es la única forma de preservar ambos.
Para congelar bálsamo de limón, debe seleccionar solo ramas frescas, recién cortadas. Puedes congelar las ramas enteras o simplemente arrancar las hojas para ahorrar espacio. Enjuáguelos y séquelos.
Coloca las ramitas u hojas en bolsas, ciérralas y congélalas.
Congelar con bálsamo de limón blanqueado también funciona bien. Prepare dos cacerolas, una con agua hirviendo y la otra con agua helada. Sumerge la ramita en agua hirviendo y enfríala inmediatamente en una cacerola con agua helada. Coloque las ramitas en un recipiente de plástico para congelar.
De esta forma, el bálsamo de limón se puede almacenar durante unos 12 meses.
Para preparar bebidas, prepare cubitos de hielo con melisa. Para hacer esto, coloque un par de hojas en cada celda del molde para hielo, puede agregar un par de gotas de lima y llenar hasta arriba con agua hervida fría.
Luego bastará con echar en un vaso unos cubitos de hielo con melisa y esperar a que se derritan un poco.
Congela más de estos cubos, porque también se pueden utilizar como loción tónica para el rostro.