Mermelada casera sencilla de grosella negra
Las bayas de grosella negra son un depósito de vitaminas que nuestro organismo necesita durante todo el año. Nuestros antepasados también conocían las propiedades beneficiosas de estas bayas, por lo que la historia de su preparación para el invierno se remonta a siglos. En la mayoría de los casos, en aquella época las bayas se secaban y se guardaban en bolsas hechas de lino tejido en casa.
Y nuestras bisabuelas y abuelas intentaron hacer conservas y mermeladas con grosellas negras. En mi receta te cuento cómo hacer una deliciosa y sencilla mermelada casera de grosella negra para el invierno. O mejor dicho, describiré y mostraré en fotografías paso a paso dos opciones para la preparación dulce. Son muy similares, pero la mermelada resultante es completamente diferente.
Ingredientes:
- grosella negra – 1 kg;
- azúcar – 800 gramos;
- agua – 2 cucharadas.
Hacer mermelada es una tarea que todos, incluso los cocineros novatos, pueden realizar. Lo principal es preparar las bayas, el azúcar, el recipiente de cocción, los frascos y las tapas. Y no olvides recargarte de buen humor. 🙂 Recuerda que cualquier preparación queda mucho más sabrosa cuando la cocinas con mucho ánimo.
Cómo hacer mermelada de grosella negra para el invierno.
El proceso de recolección de bayas de grosella negra es bastante laborioso. El hecho es que las bayas son pequeñas y los arbustos están densamente cubiertos de follaje. Al recoger bayas, muchos escombros, hojas y ramas secas terminan en la canasta.Por lo tanto, antes de comenzar el proceso de elaboración de mermelada, las bayas deben clasificarse, lavarse y secarse cuidadosamente con un paño de cocina.
Coge una cacerola, llénala con frutos rojos y añade azúcar granulada. Agrega un poco de agua y deja las bayas durante 2 horas, deja que suelten su jugo.
Revuelva el contenido de la sartén y colóquelo al fuego. Baja el fuego y deja que hierva.
Hervir la mermelada durante 15 minutos y apagar el fuego; dejar reposar durante 2 horas.
Ahora vuelve a encender el fuego y vuelve a hervir la mermelada.
En esta etapa, puede proceder de dos maneras: continuar cocinando durante otros 15 minutos y verter en frascos esterilizados. En este caso, la mermelada casera de grosella negra contendrá bayas enteras.
O haga puré el contenido de la sartén con una batidora de mano y continúe cocinando como en el primer caso: 15 minutos. Personalmente, a menudo hago puré de mermelada con una licuadora, porque a mi pequeño milagro le gusta más esta consistencia de mermelada. 🙂
Frascos limpios y lavados esterilizar en tu forma habitual. Vierta agua en la cacerola y baje las tapas de los frascos.
Vierta la mermelada en frascos. Primero llene 1/3 del frasco y luego completamente hasta arriba. Selle inmediatamente los frascos con tapas esterilizadas y reserve. Los frascos deben enfriarse de la forma habitual.
La mermelada casera de grosella negra, extraordinariamente sabrosa y saludable, es ideal como relleno para tartas y tortitas, se puede servir con té y utilizar en la preparación de cremas y yogures. Además, son útiles como un sabroso medicamento para resfriados, dolores de garganta, tos y otras enfermedades virales. Los frascos cuidadosamente cerrados se almacenan durante todo el invierno.